Busca habitaciones en casas particulares en Isla de Barú

Uno de los mejores lugares que hubiera podido elegir. Una posada entre naturaleza y mar que respecta el ambiente, en el medio de Playa Blanca sino lejana de todo el caos. Mono y lo staff me han trasmitido mucha amistades y buona energia

Ante todo nos encantó el servicio, son muy cordiales, en el trato, te tienen todo a la mano y y hasta te nos ayudaron an el cronograma durante el viaje a las islas y demás atractivos turísticos... créeme que te digo que sale muy económico todos los planes a las islas y las pasadas con ellos.

La tranquilidad del lugar El ambiente era muy grato La cocina era compartida por lo que podías cocinar tus cosas y no gastar tanto dinero en comer La atención de Carlos era muy personalizada por lo que era de mucha ayuda Las habitaciones eran cómodas y podías guardar tus víveres en un cooler por los bichos

Nos encantó, Mayra nos colaboró en todo y más, excelente servicio. La atencion del personal espectacular. Recomendado 100%, la comida deliciosa

Es un lugar muy acogedor, la vista espectacular y el trato del personal excelente 👌

muy amables y atentos, muy acogedor, la comida deliciosa 🥰🥰🥰

Si busca un rincón de paraíso donde disfrutar de unas vacaciones sencillas pero inolvidables, el ancestral Renacer Barú, ubicado en la playa, es la opción perfecta. La ubicación junto al mar es fabulosa, con aguas cristalinas y un ambiente relajante que invita a desconectar. La propiedad es sencilla, sin lujos excesivos, pero acogedora y limpia, ideal para quienes desean desconectar y sumergirse en la naturaleza. La ubicación es buena, a unos 15 minutos de la zona más concurrida de Playa Blanca, con restaurantes y pequeños mercados cerca. Juan es un excelente anfitrión, siempre disponible para ayudar o responder preguntas. Brian es atento, atento y amable. También nos ayudaron a organizar traslados de ida y vuelta a Cartagena con excelentes conductores. Si lleva equipaje pesado, ofrecen un pequeño paseo en lancha desde la entrada de la playa hasta el Renacer a un precio razonable. Las habitaciones son sencillas pero cómodas, con baño privado. Las comidas, preparadas por Juan como chef, son deliciosas y el wifi es bueno. La falta de agua potable y la falta parcial de electricidad no arruinaron los nueve maravillosos días que pasamos en Barú; al contrario, nos animaron a deshacernos de lujos innecesarios, incluyendo las chanclas que casi nunca usamos durante nuestra estancia. La propiedad también cuenta con varios gatos e Isis, una perra muy buena. La playa está limpia y tiene un arrecife de coral donde se pueden admirar los peces, incluso si ya se ven en la orilla del hermoso mar. En resumen, si busca unas vacaciones sencillas, sin lujos, pero emocionantes, el ancestral Renacer Barú es el lugar ideal. Una verdadera joya para quienes desean descubrir el mar y la tranquilidad en un ambiente familiar y auténtico.

La atención del personal, la comida, lugar extraordinario..!

Muy cómodo económico y el personal muy amable y atento, la mejor zona de la playa porque estaba solito

La ubicación y el bar, los precios justos la comida rica la cama cómoda