Busca albergues en Isla de Barú

DespertArte espacio de Arte y Hospedaje tiene jardín, terraza, restaurante y bar en Playa Blanca. El alojamiento está a pocos pasos de Playa Blanca. El cafetería es ideal para tomar algo. Cami y Sol nos escribieron días antes para coordinar nuestra llegada. Son tremendas anfitrionas, dos hermanas argentinas que no solo tienen una energía hermosa sino que es notable el gran trabajo que hacen a diario para recibir y ocuparse de que todo esté en orden para quienes se hospedan en su lugar! Hacen que uno tenga una estadía cálida y confortable. La vista del balcón es increíble! Y por cierto, ahí pegado al hospedaje llega el oleaje suave! Cenamos una noche allí comida vegetariana que ellas elaboran, muy rico! Está en una zona tranquila de Playa Blanca, quienes vayan por el día a la zona plenamente turística verán otra realidad caótica, caminen 15 min y encontrarán esta zona mucho más linda y tranquila!

La Cabaña Glamping Geronimo dispone de salón de uso común, terraza, restaurante y bar en Playa Blanca. Este alojamiento, que cuenta con habitaciones familiares, también ofrece piscina al aire libre. Los glamping son todo una experiencia. Necesitaba descansar y tomé la decisión de ir a Barú y encontrar este lugar en la zona Playa Tranquila. Los glamping son de lona con estructuras metálicas que le brindan el formato. Tienen puerta con llave, luz todo el día y agua. Como sabrán en Barú tiene una infraestructura demasiado básica, por ende todo esto lo hace un lugar superior. El baño tiene dimensiones buenas y el box de ducha es amplio. La cama es cómoda y la ropa de cama es correcta. Las almohadas, para mi gusto, estuvieron bien. Dormir con el sonido del mar de fondo es algo hermoso (si, se escucha el mar) El aire acondicionado es de pie, y funciona bien (tuve un problema y me lo cambiaron) También tiene ventilador de pie, que para la noche viene muy bien. El desayuno es un poco básico. Te dejan elegir 1 plato del menú y te brindan un café, chocolate o té (no agua, no jugo… y dato a la pasada, no elijan el sandwich de jamón y queso en el desayuno… no lo hagan) La zona de piscina es correcta. El agua estaba un poco sucia, pero entiendo que es difícil un sistema de filtrado en ese lugar. La barra de la pileta correcta. La zona de playa es muy linda. Los camastros son cómodos y se disfrutan. La playa es soñada y más en la zona del hotel. Casi nada de piedras. Con respecto a la carta de cena, como para que tengas de referencia un plato varía entre los 8 usd y los 15 usd (si queres pulpo estamos hablando de 50usd para arriba). La carta está bien si no sos exigente… tienen tacos (que en realidad son burritos, sería bueno que lo cambien en la carta ya que confundió a unas amerinas que estuvieron una noche) enormes y riquísimos, a muy buen precio. El agua no es potable o al menos no me la jugué y compraba de a botella de litro 2 usd. La cerveza desde los 1.80 usd a los 2.30. Las limonadas 3.8 usd. Para el final deje su personal. Todos súper amables, respetuosos y con ganas de ayudarte. Pasé unos días increíbles y descanse un montón.