Landfolk has more than 3,000 handpicked holiday homes across Denmark, Norway, Sweden and Germany. The homes are personal, offer access to nature, have quality solutions and a passionate host who loves good hospitality.

Disfrute del amanecer sobre los campos desde su salón. Compre gambas frescas directamente en Rejepilleriet. Ver pasar las águilas marinas por la ventana del salón El corazón de la casa es el gran salón. Aquí encontrarás espacio tanto para socializar como para relajarte, con mucha luz gracias a los grandes ventanales. Sentirás una fuerte conexión entre el interior y el exterior, con varias salidas al jardín y la terraza que lo rodean. El jardín es un antiguo huerto en el que abundan las ciruelas, manzanas, peras, nueces y cerezas desde mediados de julio hasta octubre. A sólo 200 metros de la casa encontrará una pequeña playa y un pueblo de pescadores, que ofrecen muchas oportunidades para practicar actividades al aire libre. En Guldborg y sus alrededores podrá hacer de todo, desde comprar comestibles frescos y gambas en Rejepilleriet, hasta helados y dulces en el Café Lagunen. Visite granjas locales como Dalhøjgaard y Lindhøjs Dexter, o vaya a catar cerveza a Krenkerup Bryggeri. Todos los sábados por la mañana hay un mercado de alimentos en Maribo, que sin duda merece una visita. Conoce a Martin Nos llamamos Sarah y Martin y ésta es nuestra preciosa casa de Guldborgland de 1876. La casa conserva su entramado original y el jardín es un antiguo huerto. Desde mediados de julio hasta octubre, el jardín rebosa de ciruelas, manzanas, peras, nueces y cerezas. Tenemos unas vistas fantásticas de Tårs Vig, y con tiempo despejado se puede ver hasta Askø, Fejø y Femø. A sólo 200 metros de la casa hay una pequeña playa y un pueblo de pescadores. La zona es conocida por el santuario de aves de Vigsø, y no es raro ver águilas marinas volando junto a la ventana del salón. En las tardes tranquilas, se puede disfrutar de la cena o de una copa de vino al atardecer en el banco que hay delante de la casa. Cuando el viento sopla del oeste, puedes refugiarte en la terraza de baldosas entre la casa y el taller.