El hotel Lancaster, de gestión familiar, está justo al lado de la catedral de San Columba y tiene vistas a la bahía de Oban. Construido en 1850, ofrece refrigerios, comidas y áreas de descanso. Desde las habitaciones delanteras se puede contemplar el estuario de Lorne, casi hasta Easdale, y al otro lado, Lismore, Ardnamurchan y Mull. Todas las habitaciones del Hotel Lancaster disponen de TV y cafetera/tetera. Por la mañana, se sirve un desayuno en el comedor con impresionantes vistas que incluyen la isla de Kerrera con los lejanos picos de Mull al fondo. El desayuno se puede tomar en las habitaciones y entre los aperitivos calientes se incluyen macarrones con queso y estofado de cordero. El bar cuenta con dardos, mesa de billar, dominó, cartas, televisión y gramola. La estación de tren de Oban y la terminal de ferris de Oban están a solo 5 minutos en coche del Lancaster. Hay aparcamiento gratuito en la propiedad.

A las parejas les encanta la ubicación — Le han puesto un 8,7 para viajes de dos personas.

Las distancias en la descripción del alojamiento se calculan con OpenStreetMap©