¡Bienvenidos! Estamos felices de tenerlos aquí y esperamos que su estancia sea agradable y relajante. Siéntanse como en casa y no duden en pedirnos cualquier cosa que necesiten.

¡Hola, soy Francesca! La casa en la que os recibo tiene un significado muy especial para mí: es el lugar que, más que ningún otro, me recuerda momentos felices. He decidido compartirla precisamente por eso — para que también sea para vosotros un rincón de felicidad, serenidad y bonitos recuerdos. Espero que os sintáis bienvenidos y que podáis disfrutarla con la misma alegría con la que yo la he vivido.

Erice Vetta es una auténtica joya medieval, uno de los pueblos más encantadores de Italia. A los visitantes les encanta pasear por sus calles empedradas, admirar los antiguos muros ciclópeos y disfrutar de su atmósfera atemporal. La zona donde se encuentra la casa es muy tranquila, perfecta para descansar, pero al mismo tiempo muy cerca de los principales lugares de interés. A pocos pasos está la Iglesia de San Francisco, y con un breve paseo se puede llegar a la majestuosa Catedral de Erice, al Castillo de Venus con sus vistas impresionantes, y a los Jardines del Balio, ideales para un paseo romántico o una pausa al aire libre. Entre los atractivos culturales se encuentran la Fundación Ettore Majorana, con exposiciones y eventos científicos, y el Museo Cordici, que alberga importantes hallazgos arqueológicos y arte sacro. Los amantes de la gastronomía disfrutarán de los restaurantes típicos cercanos, donde se pueden probar platos como cuscús de pescado o la pasta artesanal busiata. Muy cerca de la casa está la famosa pastelería Maria Grammatico, reconocida mundialmente por sus dulces de almendra, genovesi calientes y mustazzoli. Por último, el teleférico panorámico que conecta Erice con Trapani es de fácil acceso y ofrece una vista espectacular durante el descenso hacia el mar.